El precio del oro supera el umbral histórico de 4.000 dólares – Bitcoin bajo presión
El precio del oro se disparó más allá de los 4.000 dólares por onza durante las primeras horas del miércoles por la mañana según Reuters. Bitcoin empezó la semana con mucha fuerza, pero desde entonces ha retrocedido hasta los 121.500 dólares. Con ello, el oro parece volver a tomar la delantera en los mercados financieros.
¿Por qué sube tanto el precio del oro?
Según los analistas, hay varias razones que explican el fuerte desempeño del precio del oro.
En primer lugar, se habla de la llamada “apuesta por la devaluación”, lo que significa que los inversores se están preparando para un período de gran devaluación monetaria.
Esto no solo está relacionado con el debilitamiento del dólar estadounidense, sino que es un fenómeno global. Al parecer, todas las grandes potencias del planeta han dejado de lado la idea de recortar gastos y, una a una, quieren estimular sus economías.
La idea es hacer que la economía crezca más rápido que la montaña de deuda. En Japón estamos viendo un desarrollo similar en los últimos días, tras la elección de Sanae Takaichi como nueva primera ministra del país.
¿Puede Bitcoin seguir el ritmo?
En teoría, Bitcoin debería poder acompañar las subidas del oro. Si comparas ambos activos en cuanto a sus características, podrías argumentar que, objetivamente, Bitcoin es un mejor medio de ahorro.
El oro cuenta, por supuesto, con una larga trayectoria. Se lleva usando desde hace miles de años para protegerse contra la inflación, y en momentos como estos esa reputación sigue teniendo un gran peso.
Tan pronto como surge un verdadero temor a la inflación en el sistema financiero, la mayoría de la gente sigue recurriendo al oro. En ese sentido, Bitcoin sigue actuando más como una especie de acción tecnológica prometedora.
Tiene mucho potencial, pero todavía no se comporta de manera clara como un medio de protección contra la inflación. Aunque, dados los enormes rendimientos de los últimos años, se puede decir que Bitcoin ha ofrecido más que una buena defensa frente a la devaluación monetaria.
